Hace mucho tiempo, existía un clan que debido a su poder, controlaba la autoridad de la corte imperial desde las sombras, los Kidou. Sin embargo, la fuerte influencia de este clan, despertó el temor entre los cortesanos, llevándolos a capturar a su patriarca y asesinarlo. El clan, perdió su poder tras la muerte de su patriarca, maldiciendo esa era y este mundo y luego, tras jurar revivirlo algún día, huyeron de la capital con su cabeza. En la actualidad, sus descendientes, obligados a vivir en la clandestinidad y haciéndose llamar Kidousyuu, han comenzando la resurrección de su ancestro, mediante el maligno hechizo sellado «Ingyou Jakan», invocaron a las cuatro bestias Sagradas: «Seiryuu», «Byakko», «Genbu» y «Sujyaku».